Boyacá, a través de la Mesa intersectorial de Prevención del Embarazo en la Adolescencia, continúa desarrollando acciones encaminadas a impactar los determinantes sociales asociados a las maternidades y paternidades tempranas, relacionadas con los embarazos en la infancia y la adolescencia, así como promover y garantizar el desarrollo integral de los niños y adolescentes boyacenses.
Según la referente de la dimensión de Salud Sexual y Derechos Reproductivos de la Secretaría de Salud, Yenny Marcela Lemus Cerón, con la pandemia por COVID 19, se han vivido periodos continuos de cuarentena y aislamiento, que han alterado la forma en que viven y se relacionan los adolescentes y jóvenes, así como la dinámica familiar y las relaciones sociales, educativas y laborales, que se tejen en sus vidas, cuyos efectos a corto y largo plazo, podrían revertir los logros que se han alcanzado hasta la fecha en el acceso a los servicios para adolescentes y jóvenes y sus familias, afectando la continuidad y oportunidad en la prestación.
“Representantes de múltiples sectores e instituciones, así como algunos líderes juveniles se reunieron en esta mesa intersectorial, para coordinar acciones que den respuesta, a través de un plan de acción que se ha venido revisando y concertando entre los integrantes, sobre la oferta institucional frente a la prevención del embarazo en la adolescencia, en el marco de la contingencia por COVID 19”, indicó Lemus.
Agregó que, dentro del plan de acción, se tiene incluida la articulación de acciones a desarrollar en el marco de la Semana Andina de Prevención del Embarazo en la Adolescencia, cuyas actividades se realizarán del 21 al 26 de septiembre, a través de la virtualidad y otros medios, que permitan la visibilidad y posicionamiento de este fenómeno, así como lograr la participación de adolescentes y jóvenes en estos espacios.
“Este año tendremos en cuenta un enfoque que aborde la respuesta sobre los efectos de la pandemia, en la prevención del embarazo en la infancia y la adolescencia, acorde con los lineamientos nacionales”, señaló la referente.
Es de resaltar, que este espacio intersectorial ha estado activo desde el año 2016 y busca potencializar las estrategias y acciones que desarrolla cada sector, para el logro conjunto del desarrollo integral de niños y adolescentes.
La Organización Mundial de la Salud y otras organizaciones como la comisión nacional intersectorial para la garantía de los derechos humanos, sexuales y reproductivos han advertido un posible incremento en las desigualdades sociales, de género y los determinantes sociales del embarazo en la adolescencia, con un efecto devastador en la salud de las mujeres adolescentes y jóvenes.
La segunda sesión contó con la participación de los representantes de las secretarías de Salud, Planeación, Educación, Cultura, Gobierno, Casa de la Mujer y estudiantes universitarias, entre otros, quienes evaluaron y debatieron estrategias para el fortalecimiento de actividades en prevención del embarazo en adolescentes, así como sus derechos sexuales y reproductivos, haciendo énfasis en menores de 14 años.