Fue una etapa animada por el ecuatoriano Carapaz, quien comenzó una larga fuga junto a su compañero Kwiatkowski, que de a poco fue sacando mucha ventaja con respecto al grupo de favoritos, que lo dejaron ir sin ningún problema.
Sin embargo, la acción no iba a llegar sino hasta el ascenso al Plateau des Glières, último puerto fuera de serie de la jornada y del Tour de Francia. Landa fue el encargado de dinamitar la carrera con su ataque y el Jumbo fue perdiendo unidades. Urán también se vio damnificado y cedió tiempo con respecto a los favoritos. Yates también perdió la rueda.
A falta de un kilómetro, Pogacar lanzó un nuevo ataque, pero Roglic lo contestó muy bien y cerró esa diferencia. Mientras tanto, López estuvo bien ubicado y a rueda con los favoritos, defendiendo su tercer puesto en la general.