Es lo que se evidencia del anuncio que hizo este fin de semana el presidente Duque con la puesta en marcha de lo que han llamado “Línea Especial de Crédito, LEC, El Campo Avanza” que apalancará recursos hasta por $500.000 millones, para pequeños y medianos productores del campo.

De acuerdo con la información oficial, el programa fue lanzado en Villavicencio, precisando que se destinarán $44.000 millones para el subsidio de la tasa de interés que será de DTF -1% efectivo anual con plazos de hasta tres años y periodo de gracia hasta por un año”, para financiar actividades como servicios de apoyo, siembra de cultivos de ciclo corto, sostenimiento de cultivos perennes, la producción pecuaria, comercialización y otros más.

El texto cita las palabras textuales de Duque:“la nueva línea de crédito que se llama ‘El Campo Avanza, el Campo Progresa’, donde hemos puesto cerca de $500.000 millones de créditos, para pequeños productores y medianos productores… no solamente con mejores condiciones de plazo, tenemos seis meses de gracias y tenemos, también, algo muy importante, $44 mil millones que vamos a destinar a lo que se conoce como subsidio de tasa de interés”.

Precisa la información oficial que los interesados en adquirir esta LEC, pueden ir al Banco Agrario de Colombia en cualquier sucursal del país o adquirirla con su intermediario financiero de confianza.

Recursos mínimos…

Es evidente que destinar 500 mil millones de pesos para los pequeños y medianos productores del campo, apenas son migajas si se compara con los enormes gastos destinados a otros frentes a raíz dela crisis ocasionada por la pandemia.

La financiación y verdadero impulso al sector de pequeños y medianos productores no solo pasa por la obtención de los modestos créditos a los que pueden acceder, con una supuesta tasa muy favorable, sino que debe involucrar más frentes, que van desde asistencia técnica, adecuación de tecnologías, sistemas de riego, seguros de cosecha, verdaderas políticas de comercialización y transformación de los productos, gestión del cambio climático, etc.

Sin embargo, la recomendación es que del ahogado el sombrero: que todos los productores agrarios, en las categorías de pequeños y medianos, acudan lo antes posible al Banco Agrario o al banco de confianza, como dice el gobierno, para tratar de obtener el beneficio de la tasa, que en realidad no debiera ser la excepción sino la regla básica, para tratar de compensar todo el trabajo, el esfuerzo y la paciencia que deben exhibir los agricultores del país.