El uso extendido de mascarillas faciales y tapabocas en lugares públicos, puede reducir el número de contagios.
El ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruíz Gómez, explicó cómo la correcta utilización del tapabocas, además de la aplicación de otras medidas preventivas, le ha permitido a Colombia bajar a lo largo de estos meses, la tasa de contagios, en la medida que se ha dado la reapertura gradual de las actividades.
“Pasamos de ser muy laxos con el tapabocas a hoy en día tener una mucha mejor utilización de este, y se ha evidenciado”, afirmó el jefe de la cartera de Salud.
Sin embargo, ante la masiva oferta de este producto, es necesario tener en cuenta algunas directrices del Ministerio y el INVIMA, para que este elemento cumpla las funciones para las que se dispone.
La referente de Control de Medicamentos de la Secretaría de Salud de Boyacá, Liliana Dorado González, indicó que teniendo en cuenta que este producto busca proporcionar una barrera para minimizar la expulsión de gotas de saliva o salpicaduras de la persona, al exterior o medio ambiente, al hablar, estornudar o toser, debe cumplir con una serie de requisitos para su uso.
“El INVIMA, a través de su Sala Especializada, declaró que las mascarillas o tapabocas desechables ya NO son insumos vitales no disponibles, por lo tanto, dio un plazo para aquellos que ya se han comercializado dentro de la emergencia, cumpliendo los lineamientos de vital no disponible, hasta agotar existencias de vida útil, declaradas por el fabricante, para que adquieran el debido registro sanitario”, indicó Dorado.
Agregó que hay varios tipos de tapabocas, los desechables, los reutilizables de tela y los hospitalarios, cuyos fabricantes deben entregar información clara y puntual, según los lineamientos del Ministerio de Salud y Protección Social y el INVIMA.
El tapabocas desechable, tiene indicación de un solo uso, los atributos a revisar para determinar fin de la vida útil y la forma de desecharlo.
El tapabocas reutilizable debe incluir el número de horas que puede ser usado de manera continua durante un día, máximo 8 horas; forma de lavado y desinfección; indicación de desecho en caso de que se haya dañado.
El tapabocas de uso hospitalario exclusivo para ambientes hospitalarios o donde se preste atención a pacientes con confirmación o sospecha de COVID-19.
Por su parte, la directora de Promoción y Prevención, Mónica María Londoño Forero, hizo algunas recomendaciones frente a su uso. “Lo primero que debemos hacer es lavar muy bien las manos antes y después de manipularlos, revisar que las costuras gruesas queden en la parte interna del tapabocas, colocar las cintas elásticas detrás de las orejas, mirar que la parte que conecta con la nariz sea adecuada a la costura más gruesa en la ubicación de su cara”, indicó Londoño.
Agregó que nunca se debe tocar la parte interna y su uso se estipula a un máximo de seis a ocho horas, pero si estornuda o se moja, se debe cambiar inmediatamente.
Los tapabocas reutilizables o de tela, deben ser adquiridos en empaques individuales y como no se garantiza su proceso de fabricación y sus condiciones higiénico-sanitarias, se deben lavar antes de su primer uso, se deben cambiar diariamente y usarse hasta máximo después de 20 lavadas.
“Algunos errores que hemos visto es que lo usan en la barbilla, en el cuello, en la cabeza, como diadema, pero siempre el uso debe ser cubriendo solo la boca y la nariz; a veces la gente se lo quita para hablar con otra persona y no debemos permitirlo, tampoco manipularlo de manera intermitente (lo subo y lo bajo), porque lo contamino y eso amerita un cambio”, señaló la directora de PyP.
Solicitó guardarlos de manera correcta, en un empaque individual, ya que es de uso personal.