La -UAEGRD- de Boyacá, atendiendo el llamado de las alcaldías, sigue apoyando el suministro de agua potable a las zonas con desabastecimiento y realiza asistencia técnica.

El Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, acudiendo al llamado de los presidentes de los consejos municipales, en su función de reducir los riesgos, en el mes de diciembre ha visitado a diferentes municipios.

En estas visitas se destaca el trabajo desarrollado en Tibaná, donde se verificó, en conjunto con la Secretaría de Planeación local, una remoción en masa, e igualmente, hizo presencia en Tutazá en la vereda Peña Negra, en Labranzagrande, en Cucaita y en Moniquirá se realizó una verificación de 5 viviendas que amenazan con desplomarse.

Es por esto, que el trabajo de la Unidad Administrativa Especial para la Gestión del Riesgo de Desastres de Boyacá, enfocado en el acompañamiento técnico, se basa en aportar a los municipios apoyo de profesionales con experiencia en este campo para recomendar acciones de mitigación del riesgo.

Por otro lado, se conoció que es necesario tener carrotanques a disposición de agua potable porque en todas las temporadas del año muchos municipios, a pesar de tener sistemas de acueducto urbano y rural, presentan emergencias, por esto desde el Gobierno Departamental se ayuda en la mitigación de estas emergencias enviando a los municipios estos automotores.

En lo corrido de diciembre se apoyó con carrotanques a los municipios de Paipa, Motavita, San Miguel de Sema, Jenesano, Soracá, Cómbita, Iza, Duitama y Arcabuco, además, de atender las emergencias presentadas por desabastecimiento de agua potable en el Hospital de Garagoa y en el Municipio de Chiquinquirá.

Son varias las labores, que desde la -UAEGRD- de Boyacá se realizan, y todas estas con el único objetivo de reducir el riesgo, de tal manera que se minimicen las afectaciones en posibles emergencias en la comunidad boyacense, pero para lograr este objetivo no solo depende del trabajo de esta entidad y de los consejos municipales para la gestión del riesgo, sino que también es obligación de todos cumplir con este propósito, analizando y formulando acciones que desde su entorno prevengan las posibles afectaciones en la comunidad boyacense y demás elementos expuestos.